TAO Dance Theater estrena «13 & 14» en París | El rigor hipnótico de la danza circular
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Galardonada con el León de Plata en la Bienal de Danza de Venecia de 2023, la compañía TAO Dance Theater presenta las piezas «13 & 14» en el Théâtre de la Ville de París del 16 al 19 de octubre. Pertenecientes a la Numerical Series, ambas coreografías exploran la riqueza de la danza en su expresión más pura: la del movimiento.
Fundada en 2008 por la pareja de coreógrafos Tao Ye y Duan Ni y por el productor Wang Hao, la compañía se distingue por su enfoque innovador del movimiento sustentado en la técnica corporal de la «danza circular». En sus raíces se encuentra la danza pura, basada en la repetición ritualista de gestos y movimientos naturales del cuerpo desprovistos de cualquier ornamento. Esta estética purista del baile excluye cualquier categorización.
Al observar la ejecución de «13», salta a la vista que la unidad del conjunto ni se quiebra ni se disuelve cuando algún bailarín cae, choca contra alguien o es recogido o abrazado por otro. Nunca se pierda el sentido ni el ritmo de la rotación lenta de los miembros del cuerpo de baile que orbitan de un lado al otro del escenario mecidos por una partitura de piano sencilla.
La gracia y el poder hipnótico de los movimientos rotatorios de los pies desnudos acaparan gran parte de la atención de lo que ocurre en escena. Estimulados por ritmos ralentizados que solo se aceleran cuando caen o se levantan con violencia, estos cuerpos, como meros medios o soportes, se transforman sin cesar en lo que dicte la imaginación del espectador, a ratos distraído por el concierto paralelo de toses del público que entorpeció la concentración total en el show.
La coreografía de «14», guiada por un tic tac violento como única banda sonora, parece enfocarse en la fluidez del cuerpo de baile que ondula, gira sobre sí mismo, se detiene y orbita distribuido en cinco líneas oblicuas compuestas por uno, dos, cuatro, cuatro y tres bailarines. Fruto de un complejo dinamismo y de un minucioso estudio del ritmo, «14» lleva al extremo el vocabulario corporal de la «danza circular». Estos gestos serpenteantes y repetitivos responden por igual a la dinámica giratoria de un péndulo –o de las agujas de un reloj– que al concepto cíclico de la existencia. En definitiva: del tiempo.
En cada pieza de casi media hora de duración, los bailarines giran y se balancean descalzos y –para sorpresa del público– con los ojos cerrados, en un sobrio cubículo de paredes negras y suelo blanco u oscuro, dependiendo de la escenificación. El vestuario forma parte determinante de la dramaturgia en las dos obras. Las gabardinas desestructuradas en tonos beiges y grises dominan la vestimenta de «13», mientras que la influencia del hakama y el kimono samurái y la feria cromática pop occidental marcan la reproducción de «14». En el refinado universo del TAO Dance Theater, la atención prestada a las prendas individualizadas no es casual: la indumentaria procede de DNTY, marca de ropa propiedad de los dos coreógrafos.
Por muy diferentes que sean sus creaciones, según Tao Ye y Duan Ni, «todas forman una única obra». Por eso la pareja se niega a atribuirles títulos con palabras, ya que la más mínima referencia léxica acabaría por dividir el trabajo global y evocaría conceptos o símbolos que podrían orientar o influir en la interpretación del espectador. Así se explica la numeración. A partir del «2» del dúo fundador, el número del título de la pieza coincide con la cantidad de artistas que la interpretan. Queda claro que, para ellos, la danza no necesita palabras para legitimar su esencia.
Al recoger el galardón en Venecia, los coreógrafos explicaron que, durante su formación, cada bailarín chino aprende varias técnicas de danza clásica y contemporánea, así como algunos conceptos básicos de danza tradicional. Esta rigurosa formación resulta en una agilidad extraordinaria del cuerpo y en una disciplina infalible. Sobre dicha base se apoyó Tao Ye para construir su propia técnica de «danza circular» cuya fluidez y armonía colectivas constituyen el ADN de su labor coreográfica.
El trabajo original de Tao Ye también está determinado por su estilo zen y minimalista, que oscila entre la repetición y la interrupción. Con gestos vigorosos y precisos de gran belleza visual, sus intérpretes combinan magistralmente virtuosismo, precisión rítmica y movimientos fluidos. La compañía ha presentado sus obras en diferentes espacios: desde las ruinas de un antiguo campo de batalla romano, a la Paris Fashion Week. En 2015, fue invitada a colaborar en el desfile de la marca Y-3 del diseñador japonés Yohji Yamamoto.
TAO Dance Theater es también una de las formaciones chinas de danza contemporánea más solicitadas en la escena internacional. Las coreografías de la Numerical Series fueron formuladas siguiendo un concepto sencillo y creativo, y han sido representadas en más de cuarenta países y un centenar de festivales de todo el planeta. TAO lleva más de quince años explorando la idea del movimiento puro. Por eso no es de extrañar que sus gestos dinámicos e hipnóticos generen una energía ondulante expansiva que se apropia de los cuerpos que los reproducen y cautiva a las mentes de quienes los observan.
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